Indiferencia por la seguridad de la ciudadania?

Por Rubén Darío Cabral G.

He recibido varias quejas de buenos ciudadanos en relación de ciertas actividades "anormales" que suceden a diario en nuestra ciudad.
Y no es cosa autoctona nuestra, suceden en todo el pais.
Son las siempre "malas costumbres", "folklore", "irracionalidad" por 
llamarlo de alguna forma a las actividades ilícitas e inaceptables que realizan contados "ciudadanos" descaradamente frente a toda la población honesta y deseosa de una vida tranquila, mas sociable y democrática.
Solo por citar algunas de ellas, el tema de los jovenes o menores (a espaldas de sus padres?) emprenden todas las noches las famosas carreras de motos, en las rutas dellegada a la ciudad e incluso en pleno centro, sobre la Calle Pdte. Franco, en las horas de las madrugadas dejando a mas de uno sin dormir. Me imagino a esas personas pensando que podrian hacer para remediar el asunto, aunque se de denuncias en las comisarias y hasta las fiscalias de estas actividades molestas. Vemos asimismo todos los dias a menores de edad manejando el medio de transporte mas utilizado en Concepción como son las motocicletas, en todos los sectores y ante la vista pasiva de propios y extraños que ni se inmutan para reaccionar, a expensas de provocar cualquier tipo de accidentes. Mayores o "padres" transportando a sus pequeños hijos, dos o tres por delante y detras sobre la motocicleta confiando de que por azar no les ocurra nada en las calles.
Y que ejemplos estamos dando a esto menores, que una vez convertidos en lobos, esos chicos terminarán devorándose a sí mismos.
Como ven son 3 ejemplos clásicos y puntuales nada mas para "despertar la conciencia ciudadana", que algunos dirian, donde estará?
Las cifras de accidentes de transitos son elocuentes, y hasta algunos dicen que es una "epidemia" nacional por la frecuencia aumentada en los ultimos años.
Hay personas y grupos que despliegan un esfuerzo descomunal, loable por supuesto, para combatir estos males, pero su efecto positivo se diluye en un mar de inacciones de quienes corresponden actuar.
Tenemos que esperar el hartazgo y la desesperación que pueden hacer mella en una ciudadanía minoritaria que se atreven a resistir a aceptar estas acciones indecentes?
Ante la pasividad e impunidad de la conciencia de la "mayoría".



Tan decisivo como tener una gran ciudad es recuperar la decencia, el respeto de la ley, la dignidad que reclaman los indignados antes de que alguien los convirtiera en marginales a esos "ciudadanos" que tienen todo el derecho de rectificarse.
Las autoridades encargadas de procurar y administrar justicia, los legisladores y la sociedad en su conjunto, tienen mucho trabajo por hacer en ese contexto.
¿Qué pasa cuando los tribunales no imparten justicia? ¿Qué pasa cuando la policía no
protege al ciudadano? ¿Qué pasa cuando los hospitales no curan?
Que sociedad tendriamos cuando las instituciones no responden a las ideas para las que fueron creadas, donde los individuos confían por tanto en esas instituciones y piensan que sus prójimos sienten la misma confianza que ellos. Si los individuos no están en condiciones de avanzar en las demandas cotidianas, no es posible construir una ciudadanía sólida.
La desconfianza que domina en la sociedad del miedo es una enemiga letal de la democracia. Debemos reconsiderar los sistemas de seguridad consideradas innovadoras, diferentes al accionar policial y judicial clasico para el diseño de las políticas de seguridad ciudadana.

Por lo menos es lo que pienso.

Tiempo de lluvias para el norte


Estos meses han sido propicios para la aparición de mucha inclemencia del tiempo.


También ha sido propicio para desnudar las incontables carencias en la ciudad de Concepción y en general todo el departamento.
Me refiero especialmente a las consecuencias de las constantes lluvias y a las calamitosas calles y rutas, los drenajes insuficientes de algunos barrios para las aguadas, que dejan mucho saldo negativo a la población en general, haciendo hincapié al sector comercial que resiente preponderantemente en sus ingresos, aunque para el sector productivo especialmente la agricultura ha sido una bendición.


Es innegable que las deficiencias que ello ha venido arrastrando, se ha visto ya hace varios años e incluso décadas, pasando por muchas autoridades que no toman al toro por las astas. Es preocupante la desidia de los que deben salvaguardar el bienestar de la ciudadanía y cambiar el calamitoso estado de las calles y rutas del departamento.
Claro que estas penurias son mucho más evidentes en las zonas ribereñas, que sin la presencia del muro de contención, la situación sería mucho más adversa.
Aun así es pertinente la ocasión para referirlas y es tiempo que nuestra ciudad pinte de otra manera, que por lo menos las calles se vean limpias e impecables, que la población pueda salir de sus viviendas sin la preocupación de las inundaciones en los hogares y las calles.
De este modo es un llamado de atención más para las autoridades a fin de urgir alguna solución verdadera y eficaz.
Por lo menos es lo que pienso, y no creo estar lejos de la verdad.

Esperanzas de desarrollo importante para el Norte

Se abre un nuevo y augurador año para nuestro norte!
Empieza un año y empieza también nuevos sueños y esperanzas de avanzar en las realizaciones en pos del bienestar de todos.
Concepción es una de las pocas ciudades, rica en historia y luchas, cuna de incontables personajes que hicieron historia y fueron protagonistas de grandes avances en el Paraguay antiguo.
En honor a todos ellos estamos obligados a mantener esa inflexible voluntad de arrancar en favor del progreso de esta importante región de la república.

Y es de esperar en principio que nuestras autoridades, claves para el despegue, tengan ese coraje y “amor propio” por nuestro departamento. Empezar a cambiar y apostar por el desarrollo impostergable de Concepción, participar activamente en  importantes propuestas para el encaminamiento de acciones que apunte a mejorar todas las instancias que requiera la sociedad concepcionera.
Este pueblo se merece un mejor rumbo!
Necesitamos avanzar, tenemos una de las ciudades más grandes del Paraguay, visitadas por miles de trotamundos extranjeros. Apuntemos en promover el turismo que tras ello vienen un sinfín de beneficios para todos.
Mejoremos la estética de nuestra ciudad, cuidemos para mantenerla limpia y ordenada, es tiempo que emerja esa “conciencia ciudadana”, pongamos cada uno de los habitantes nuestro "granito de arena" para ello, seamos responsables de nuestras acciones, sea como ciudadano, padres, autoridades. Necesitamos ese esfuerzo mancomunado para iniciar la grandeza de nuestra región.
Así como la dignidad y valentía de grandes protagonistas anteriores de Concepción, deberíamos emular esos grandes proyectos y avances que tuvieron, acorde a los tiempos en que vivimos y a la región en que habitamos.
Concepción tiene un potencial fenomenal, rica en naturaleza, materia prima productiva y humana;  solo precisamos emprender hacia el despegue definitivo hacia el esplendor inaplazable del Norte.
Que Dios bendiga esta hermosa tierra Guaraní.

CON EL ORGULLO DE SER REGIONALISTA Y SOBRE TODO PARAGUAYO!
POR LO MENOS ES LO QUE PIENSO.

Y llegan las fiestas de fin de año...

Por Carlos Martinez

Y llega de a poquito las fiestas del ñemoco a nivel por doquier sin miramientos a nada.
Los accidentes de aquí para allá, quedando totalmente atrás aquello de una navidad en familia, y esto no es un chiste pero hace reír, porque vienen los llantos y el grito del pobrecito anga-co y buenoiteiva, ojehu chupe co'ambae anga pobrecito. Pero nadie vio que ese buenito o esa buenita no respetó la regla del tránsito vehicular, haciéndose mas grande que los profesionales que tienen mayor cuidado y con su vehículo extremadamente cuidado con los frenos casi a diez puntos, con el embrague igual con la aceleración de acuerdo a la necesidad que la pista donde va corriendo requiera, con un mantenimiento perfecto porque su vehículo debe de estar para competir, en cambio en la navidad y en el año nuevo de los concepceños se hace con vehículo que de freno, mba'eico pea, embrague empuja un poquitito, se va y se soltó el cabo, las cubiertas mas peladas que botellas, aceleración al máximo y para colmo levantado (los motociclistas) la rueda delantera, sin saber que a lo mejor la horquilla de su moto y los rulemanes aguantarían las proezas de sus conductores.
Destino final puestos de salud, hospital regional y otros con mayor suerte tiene que ir a Asunción, allí se inicia una odisea de flor y flor,no hay ambulancia, ah ya se consiguió la ambulancia, falta combustibles, e'ana, ha jahana karai fulano rendape, ya se consiguió el combustible gracias a la bondad de don ma'era.
Pero la odisea sigue, falta el viatico del conductor de la ambulancia y para la enfermera que acompaña al paciente con sus datos clínicos, para ser rápido gua'u en el centro asistencial capitalino, solo esto para tener en cuenta y cuidarse del trago largo en estas fiestas de recordación del nacimiento del niño Cristo y no sigamos creyendo que la luna es queso cuando vivimos como perejil en maceta o sardina en latas. 

Hasta la próxima.

Monumento al Indio muy dañado


Concepción.- (Por Rubén D. Cabral) El monumento en homenaje al Indio, uno de los mas históricos y emblemáticos de la ciudad de Concepción está muy deteriorado. Se encuentra ubicado sobre la Calle Gral. Bernardino Caballero (Ex Ruta 5ª.).

El monumento presenta algunas grietas y quiebres en las paredes y en los techos. Hay humedad y algunos desprendimientos de parte de las paredes y techo. (foto)
Asimismo la cerca perimetral se encuentra muy estropeada, como la pintura del edificio.
El edificio se los ve muy abandonado del cuidado, mantenimiento y limpieza.
Da vergüenza y tristeza ver como se ha deteriorado gran parte de nuestros patrimonios culturales.
De esta forma recurrimos a la conciencia de las autoridades comunales a fin de velar por la conservación de los distintos monumentos históricos de la ciudad, ya que son visitas ineludibles de turistas no solo del país sino del exterior. Ojalá tomen conocimiento de lo que significa la destrucción y mantenimiento del nuestro patrimonio cultural.