Tiempo de lluvias para el norte


Estos meses han sido propicios para la aparición de mucha inclemencia del tiempo.


También ha sido propicio para desnudar las incontables carencias en la ciudad de Concepción y en general todo el departamento.
Me refiero especialmente a las consecuencias de las constantes lluvias y a las calamitosas calles y rutas, los drenajes insuficientes de algunos barrios para las aguadas, que dejan mucho saldo negativo a la población en general, haciendo hincapié al sector comercial que resiente preponderantemente en sus ingresos, aunque para el sector productivo especialmente la agricultura ha sido una bendición.


Es innegable que las deficiencias que ello ha venido arrastrando, se ha visto ya hace varios años e incluso décadas, pasando por muchas autoridades que no toman al toro por las astas. Es preocupante la desidia de los que deben salvaguardar el bienestar de la ciudadanía y cambiar el calamitoso estado de las calles y rutas del departamento.
Claro que estas penurias son mucho más evidentes en las zonas ribereñas, que sin la presencia del muro de contención, la situación sería mucho más adversa.
Aun así es pertinente la ocasión para referirlas y es tiempo que nuestra ciudad pinte de otra manera, que por lo menos las calles se vean limpias e impecables, que la población pueda salir de sus viviendas sin la preocupación de las inundaciones en los hogares y las calles.
De este modo es un llamado de atención más para las autoridades a fin de urgir alguna solución verdadera y eficaz.
Por lo menos es lo que pienso, y no creo estar lejos de la verdad.